Un post atípico

Por un post, dejamos aparcada la bisutería, la moda, los DIY, las cosas bellas, el arte, todo lo que da sentido al universo Elektra Prendas… O quizás no tanto. Queremos ejercer esta vez nuestro derecho a la queja. El punto de partida es un correo electrónico de respuesta. Decía asÍ: «Siento comunicarte que no podemos emitirte la factura correspondiente que nos has solicitado porque solo enviamos a Península y Baleares vía Correos. Siento las molestias, Un saludo».

No desvelaremos qué tienda online fue la que nos respondió (muy amablemente, eso sí) de esta manera a nuestro intento de compra. Y no lo vamos a desvelar porque, en realidad, da igual. La noticia sería encontrar una que sirviera a Canarias…

Estamos hartas de ser menos que nadie. Las tiendas dirán que tenemos otras ventajas fiscales y puede que sea cierto para determinados sectores económicos, pero ni el ciudadano de a pie ni el pequeño empresario se beneficia de ello y sin embargo, sí que le perjudican efectos secundarios de la insularidad como éste y como tantos otros.

Que les vamos a contar que no sepan ya nuestras amigas de las Islas. Quizás para las que nos siguen desde el resto de España, este post sirva de explicación a muchas cosas. Nos cuesta viajar a la Península el doble que a ustedes, amigas peninsulares, venir a Canarias. Y decimos el doble aun contando con el descuento de residente. Imagínense si no existiera. Y eso, si no hablamos de viajar a cualquier otro aeropuerto del país que no sea Barajas.

Y nos cuesta el doble comprar algo por Internet. Eso sí nos lo venden (volvemos al email de respuesta con el que comenzábamos el post). Al precio de venta de cualquier producto, hay que sumarle gastos de envío (lógico) y a estos, impuestos y aranceles varios que son un auténtico misterio siempre. Tú compras. Lo que te cueste, nunca lo sabrás hasta que lo recibas en casa. ¿Dónde ha ido a parar ese dinero que has pagado de más? Nadie lo sabe. ¿Por qué ha sido esta vez un suplemento de 10 euros y en una ocasión anterior lo fue de 5? Tampoco nadie conoce la respuesta.

Se nos llena la boca al hablar del ya presente del comercio digital. Pues, digamoslo de forma tajante: Para Canarias, si la venta online implica envío físico, no hay futuro. Ni para compradores ni para vendedores. Por lo menos, hasta que no se arreglen las cosas y seamos igual de ciudadanos del mundo que el resto del planeta.

Buf, ya está… Mucho mejor… Liberadas… Sentimos el tono que a muchas habrá despistado, pero una queja es una queja y el derecho a realizarla es un derecho. Gracias por escucharnos.